y (iii) constatar que las casas cuenten con instalaciones sanitarias interiores en el ámbito urbano y caso
contrario plantear el trabajo de educación sanitario mencionado.
Desde el punto de vista de la administración, principalmente en el ámbito urbano, con la excepción del
Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Lima (SEDAPAL) que administra la ciudad de Lima y Callao,
las alternativas de gestión ensayadas desde la década de los 70s, no han dado buenos resultados. Estas
alternativas han pasado desde: (i) constituir una empresa de servicios en las grandes ciudades (Lima, Trujillo
y Arequipa en la década de los 70s) y el resto de ciudades se seguía administrando desde el Ministerio de
Fomento y Obras Públicas en Lima; (ii) constituir un holding empresarial (Servicio Nacional de
Abastecimiento de Agua Potable – SENAPA) cuyo centro estaba en Lima con empresas filiales por cada
departamento (etapa previa a la descentralización por Regiones - década de los 80s) no habiéndose llegado
a concretar este propósito en todos los departamentos; y (iii) responsabilizar a cada municipio por la
administración de sus propios servicios (Ley de municipalidades en los 90s), dándole varias opciones de
gestión a los municipios para concretar este propósito.
Así, tenemos que la prestación de los servicios está atomizada existiendo en el país 50 empresas prestadoras
de servicios (EPS) que atienden aproximadamente al 62% de la población urbana y el otro 14% de población
urbana es administrada directamente por alrededor de 400 municipalidades menores, sin regulación y sin
que exista una justificación técnica, social o económica para que éstas no sean administradas por las EPS.
SEDAPAL atiende a un poco más del 40% del total de población que está bajo administración de las EPS y
las demás EPS localizadas en las regiones al otro 60%. Estas EPS están reguladas por el ente regulador
(SUNASS) y reciben apoyo técnico y financiero en materia de administración del Organismo Técnico de la
Administración de los Servicios de Saneamiento (OTASS) adscrito al Ministerio de Vivienda, Construcción
y Saneamiento. La atomización es tal que por ejemplo, existen hasta 5 empresas en una región, sabiendo que
existen economías de escala y factores que deberían considerarse para lograr integrar la administración de
estos servicios, tomando en cuenta que los sistemas de saneamiento están de por si descentralizados, lo cual
hace que las funciones operativas y comerciales deban desarrollarse in situ, pero se puede optar, por
ejemplo, por una administración más centralizada por macro región para el resto de funciones como las de
planificación, administrativas, financieras, etc. buscando la eficiencia en la prestación de los servicios. Esto
eliminaría algunos retos existentes, por ejemplo, la falta de recurso humano capacitado por
región/municipalidad, la falta de equipamiento y de recursos financieros por región/ municipalidad, etc. y
además reduciría la interferencia política en el manejo de los servicios, principalmente a nivel regional y
local. A la fecha, la OTASS tiene la responsabilidad de buscar esta integración, pero todavía no hay
resultados significativos, pues se requiere voluntad política para el establecimiento de un programa nacional
con metas, acciones, costos, plazos, e incentivos financieros para lograr resultados efectivos.
2.1. Respecto a la institucionalidad del sector
Tal como se ha comentado, la institucionalidad del sector ha variado mucho durante estas últimas 5 décadas,
que aún es un reto lograr la prestación eficiente y sostenible de los servicios. De un lado, el sector es muy
descentralizado, pues los sistemas de agua y saneamiento físicamente están instalados en los diferentes CP,
con lo cual la operación y comercialización de los servicios tiene que realizarse in situ y para ello existen en
el país diversos prestadores de servicio (EPS, municipios, organizaciones comunales y otros). Por otro lado,
hay ciertas funciones sectoriales que están centralizadas como, por ejemplo, la fijación de políticas, el
planeamiento sectorial, la asignación de recursos, la regulación y otras.
Para la prestación de los servicios existen en el país: (i) SEDAPAL, empresa responsable de los servicios de
Lima Metropolitana, incluyendo el Callao; y las EPS municipales (49) que en conjunto con SEDAPAL tienen
la responsabilidad del servicio de aproximadamente el 62% de la población del país; (ii) alrededor de 400
municipios que prestan servicios directos a una población urbana equivalente al 14% de la población del
país, sin que exista justificación para que no estén incorporadas en una EPS; y (iii) organizaciones comunales
administradoras de los servicios de saneamiento rural responsables de los servicios del otro 24% de la